Solo a él, solo a Quentin Tarantino se le puede ocurrir hacer una película como esta. Para los que aún no sepáis de qué trata, yo diría que la sinopsis es simple, aunque el guion, los giros y la narrativa de la película no lo son en absoluto. Quizá por eso, quizá porque contarte de que va la película le quitaría la gracia al film, no lo pienso hacer.

Tarantino nos vuelve a enseñar cine, y nos vuelve a sorprender muy gratamente con una violencia y salvajismo brutal, a la vez que con una tensión y ambiente de sobresaliente. Al menos, en la sala de cine que yo estaba, el público respondía al unísono a todos los detalles que Tarantino iba introduciendo en su película, chistes, música sublime (como siempre), tensión, respeto y admiración por los personajes, etc.
La película tiene MOMENTAZOS. Creo que contabilicé unos 8 o 9 momentos clave creados para el subidón de un orgasmo colectivo.
Eso sí, se pasa literalmente por los huevos la historia, es decir, no esperéis encontrar un documento histórico de la Francia ocupada por los nazis, y eso es lo que más me pone de Tarantino. Que hace lo que le da la gana siempre, y eso vale mucho en un cine contaminado, encasillado y jerarquizado como el cine de Hollywood.
Recomiendo encarecidamente a todo el mundo que vaya a ver la película AL CINE. Esta película no es para descargarla, es para verla en pantalla grande, no os la descarguéis y verla primero en el cine, así la disfrutareis más.
Ah! Y aunque Bard Pit está genial, los bastardos son la leche y Hitler es un actorazo de máscaras, la estrella indiscutible de esta fiesta es sin duda el actor Christoph Waltz. ¡Es increíble!

Tarantino nos vuelve a enseñar cine, y nos vuelve a sorprender muy gratamente con una violencia y salvajismo brutal, a la vez que con una tensión y ambiente de sobresaliente. Al menos, en la sala de cine que yo estaba, el público respondía al unísono a todos los detalles que Tarantino iba introduciendo en su película, chistes, música sublime (como siempre), tensión, respeto y admiración por los personajes, etc.
La película tiene MOMENTAZOS. Creo que contabilicé unos 8 o 9 momentos clave creados para el subidón de un orgasmo colectivo.
Eso sí, se pasa literalmente por los huevos la historia, es decir, no esperéis encontrar un documento histórico de la Francia ocupada por los nazis, y eso es lo que más me pone de Tarantino. Que hace lo que le da la gana siempre, y eso vale mucho en un cine contaminado, encasillado y jerarquizado como el cine de Hollywood.
Recomiendo encarecidamente a todo el mundo que vaya a ver la película AL CINE. Esta película no es para descargarla, es para verla en pantalla grande, no os la descarguéis y verla primero en el cine, así la disfrutareis más.
Ah! Y aunque Bard Pit está genial, los bastardos son la leche y Hitler es un actorazo de máscaras, la estrella indiscutible de esta fiesta es sin duda el actor Christoph Waltz. ¡Es increíble!
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